¿Qué causa la pérdida de esmalte en los dientes?
Sin esmalte, los dientes se desgastarían significativamente. Cada vez que hablas, masticas o muerdes, estás causando estrés a tus dientes. El esmalte de tus dientes es responsable de protegerlos y evitar el desgaste normal durante el mayor tiempo posible. Sin embargo, con el tiempo, es posible que notes que tu esmalte comienza a desaparecer. Parte de esto es natural. Sin embargo, existen algunas causas que pueden hacer que tu esmalte desaparezca más rápido de lo que debería. Esto es lo que necesitas saber sobre la pérdida de esmalte.
El propósito del esmalte
Para entender cómo se pierde el esmalte, es importante saber qué hace exactamente el esmalte en los dientes. El esmalte de los dientes es, en realidad, la parte más fuerte del cuerpo. Recubre la corona de los dientes y ayuda a garantizar que no se desgasten con el uso diario.
Además de la protección física, también brinda protección contra temperaturas extremas y productos químicos. Sin esmalte, sus dientes pueden estar expuestos a estos entornos hostiles. Es algo que seguramente sentirá.
La causa principal de la pérdida del esmalte
Una de las principales razones por las que se pierde el esmalte es el ácido. Existen distintos tipos de ácido y cada uno de ellos puede desgastar el esmalte con el tiempo. El esmalte también se astilla y se puede desgastar con el uso diario.
El ácido, por otro lado, puede introducirse en el esmalte de distintas maneras.
Ácidos presentes en alimentos y bebidas
Tal vez el mayor culpable sea la comida y las bebidas que bebes. Los refrescos como la Coca Cola y otras bebidas gaseosas son un gran problema. Contienen mucho ácido cítrico y productos químicos agresivos. Cada vez que tomas un trago de refresco o gaseosa, te estás lavando los dientes con ácido y productos químicos agresivos.
Si consumes refrescos en exceso, puedes estar seguro de que tu esmalte se desgastará rápidamente.
Incluso algunas bebidas de frutas pueden ser problemáticas. Ciertos tipos de bebidas de frutas contienen más ácido erosivo que las baterías. Si bebes regularmente ese tipo de bebidas, la pérdida por erosión será fenomenal.
Ciertos alimentos también pueden provocar la pérdida del esmalte. En particular, los alimentos con un alto contenido de azúcar o almidón pueden provocar una gran acumulación de ácido. También tienden a acumularse en los dientes. Si no se cepillan los dientes inmediatamente, los restos de comida pueden provocar la formación de placa. Esto dificulta que el esmalte haga su trabajo.
Problemas gastrointestinales
Tanto si sufres de reflujo ácido de forma natural como si se produce después de comer determinados tipos de alimentos o bebidas, es posible que también estés provocando la pérdida de esmalte. El reflujo ácido, en particular, hace que el ácido se acumule en la garganta. A veces, puede llegar a los dientes y cubrirlos de ácido. La mejor forma de evitar la pérdida de esmalte a causa del reflujo ácido es evitar la dieta que lo provoca en primer lugar.
Genética
A veces, también puede heredar una afección que provoca algo como sequedad de boca. Si tiene un flujo salival bajo, eso también puede provocar pérdida de esmalte. Sin saliva de forma regular, el esmalte no se limpia con regularidad. El ácido permanece adherido a los dientes y continúa desgastando el esmalte.
Factores ambientales
Otra causa importante de la pérdida de esmalte es el medio ambiente. Si tiendes a rechinar los dientes por la noche o cuando estás estresado, estás desgastando tu esmalte. Esto también incluye el desgaste normal del uso diario.
Medicamentos
Desafortunadamente, ciertos medicamentos también pueden causar pérdida de esmalte. La razón es la pérdida de calcio o de hueso como efecto secundario de la medicación o porque aumenta la acidez de la boca. Algunos medicamentos pueden incluso causar reflujo ácido. Se ha demostrado que ciertos medicamentos como la aspirina o los antihistamínicos causan especialmente pérdida de esmalte.
Proteja sus dientes
Es evidente que existen muchas causas que provocan la pérdida de esmalte. Afortunadamente, existen algunas variables que se pueden controlar. Comer alimentos que no contengan mucha azúcar, almidón o ácido es un buen primer paso. Dejar de consumir bebidas de frutas y refrescos poco a poco es otra gran opción. Por último, quienes tienden a rechinar los dientes pueden beneficiarse del uso de un protector bucal mientras duermen. Al proteger el esmalte, se pueden mantener los dientes sanos.